MARRUECOS ESPERA A LA HERMANDAD DE LA PIEDAD QUE INICIA EL MIÉRCOLES SU VIAJE ANUAL

Un año más, la Hermandad de la Piedad de Cabra, organiza para sus hermanos un viaje de convivencia que suele llevarse a cabo en el Puente de la Inmaculada. En esta ocasión, la Cofradía egabrense pone rumbo por primera vez a otro Continente y estarán desde el 6 al 10 de diciembre visitando Marruecos.

Ciudades espectaculares esperan la visita de los hermanos de la Piedad, como Chauen, Asilah, Meknes, las ruinas romanas de Volubilis, Tánger y Fez. Esta última será el lugar donde se ubicará el hotel de la expedición en las tres primeras noches. Fez es la capital cultural, religiosa y artesanal del reino alauita, la ciudad vieja de Fez, Patrimonio de la Humanidad, y sobre todo su barrio con más alma, el de Fez el Bali, se retuerce en una maraña de callejones y pasadizos de regusto medieval por los que bulle el trajín cotidiano de casi medio millón de almas. Sembrada de talleres gremiales, de latoneros y ebanistas, de especieros y vendedores de lo invendible, de ancianos de aspecto bíblico y burros que trasiegan a sus lomos –lo que luego se despachará en las mil y una tiendecitas de sus zocos–, la medina de Fez es, sin rival posible, la más fascinante de todo el Magreb.

La última noche, la del sábado 9 de diciembre, será ya en Tánger antes de emprender el domingo el regreso a Cabra. En Tánger espera una ciudad cosmopolita, a través de una panorámica que servirá para avistar la ciudad incluyendo Cabo Espartel donde se unen mar Mediterráneo y Océano Atlántico, podremos adentrarnos en la ciudad, con la visita de la Alcazaba y un recorrido por la medina de la ciudad y el famoso zoco chico.

Igualmente visitaremos el Arzobispado de Tánger y conoceremos de primera mano su influencia en el País vecino.

Sin duda esperan unos días intensos, llenos una vez más de emociones y un sentimiento de hermandad que se hace latente en cada viaje de la Cofradía.